Plan de contenidos

Una estrategia de contenidos es la que define los objetivos y el plan a seguir en cuanto a la creación y distribución de contenido. Debes revisar la estrategia de contenidos anualmente para que se ajuste a los objetivos de la empresa.

En términos prácticos, tu estrategia de contenidos se verá reflejado en el calendario editorial. Este debe ser planificado de manera mensual, máximo trimestral. ¿Porqué? Esta periodo permite adaptarte a cambios en tendencias e incluir noticias relevantes de tu industria.

La definición de estrategias entonces debe ser hecha en este orden:
1° Estrategia corporativa
2° Estrategia de marketing
3° Estrategia de contenidos

Ejemplos de objetivos y tácticas de contenido:

  • Aumentar nuevos leads a través del sitio web > Generación de lead magnets para captar correos electrónicos.
  • Aumentar la atención a través de autoridad y confianza > Encuestas en comunidades y contenido especializado en el nicho.
  • Aumentar la calificación de búsqueda a través de palabras clave (SEO) > generación de artículos sobre tópicos clave de acuerdo a reporte de búsqueda de palabras clave y artículos de visitante que generen backlinks.

Cada uno de los objetivos anteriores debe tener métricas que definirán el éxito de la estrategia implementada. Así podrás mejorar tu estrategia y revisar qué puede haber salido mal.

No hay nada peor que terminar un año lleno de esfuerzo sin resultados. Definir una estrategia te permite enfocar los recursos (valiosos!) en lo que es realmente importante.

Cómo crear contenido

 

Crear contenido útil para tu audiencia se compone de tres partes:

1. Investigación

Una buena creación de contenido siempre empieza con esto. Debes averiguar lo esencial sobre tus clientes, tu nicho y tus competidores.

a. Tus clientes

Genera un mapa de empatía y define cuál será tu buyer persona, con el fin de descubrir:

  • Sus preferencias, valores, visiones del mundo y deseos.
  • Cómo se comportan y qué vocabulario usan.
  • Cuáles son sus principales problemas, dolores y necesidades.
  • Cuál es el proceso de compra que llevan a cabo. Las ventajas y desventajas para cada etapa.
  • En qué comunidades participan, qué preguntas hacen y qué palabras usan.

b. Tu nicho

Estudia tu industria. Lee white papers y reportes de tendencias. Haz entrevistas y encuestas a proveedores y stakeholders relevantes.

c. Tus competidores

  • Su propuesta de valor y sus ventajas competitivas, y cómo los comunican.
  • Su contenido: tipos de contenido y frecuencia en que la públican. Revisa qué nivel de engagement tienen con cada uno
  • Qué palabras clave SEO usan.
  • Qué es lo que dicen sus clientes de ellos. Puedes ir a sus propias páginas, o bien ir a páginas de calificación de productos especializados (ej. Capterra o G2) o generales (marketplaces tipo Amazon o reviews de Google Business).

2. Ideación de temas

Toca los temas que a tus clientes más les interese. Es decir, que le ayuden a resolver uno de sus problemas más relevantes. Inspírate en libros, estudios de industrias o páginas de competidores.

3. Creación

  • Define el mejor formato a utilizar de acuerdo a las características de tu audiencia y según la cantidad de interacción descubierta en tu investigación.
  • Usa tu persona para generar mensajes en su “idioma”.
  • Usa palabras clave.

Cómo usar un mapa de empatía para crear contenido que resuene con tu audiencia

La empresa con mayor éxito es la que entiende a sus clientes mejor que ninguna otra.

Un mapa de empatía te permite construir perfiles de tu audiencia objetivo y visualizar lo que dicen, piensan, sienten y hacen. El propósito es obtener un entendimiento más profundo de tu cliente dentro de un ámbito de una actividad, como el tomar una decisión de compra.

Dale nombre de una persona real a tu mapa, que represente a tu cliente ideal. Imagínalo con el mayor detalle posible. En qué trabaja y cómo viste.
Aquí la palabra empatía es clave. Debes ponerte en el lugar de ellos. Cuando completes cada uno de los espacios debes hacerlo hablando ojalá en primera persona.

Completa el mapa observando e investigando a tu audiencia, con datos reales. No sirve de nada que te lo imagines, la mayor parte del tiempo la gente cree saber lo que quiere la audiencia, pero en realidad no lo sabe. Idealmente una entrevista 1:1.

Luego lo que quieres hacer es convertir tu mapa en una historia. Es importante incluir emociones que hayas identificado para crear un personaje realista que te permita visualizar a tu audiencia. Explica cuáles son sus principales preocupaciones. ¿Qué dirían cuando se sienten mal porque no pueden lograr sus objetivos?

Cuando generes contenido podrás usar esta historia como input. Podrás generar contenido que ayude a calmar sus mayores dolores.

Escribe contenido que resuena con tu audiencia. Te ganarás su atención y confianza ya que tendrás en cuenta sus necesidades, y sabrás los verdaderos motivos que guían sus acciones.

 

Distribución de contenidos

Imagina que investigas a fondo tu cliente, sabes todo sobre él, y creas mucho contenido valioso para ellos. Ellos deberían venir corriendo a comprar tu producto, ¿o no?
Lamentablemente, si no distribuyes el contenido que creas, nadie llegará. Si no buscas lugares donde conectar con tu audiencia, los recursos utilizados para crear contenido no servirán de mucho.

Si quieres obtener resultados, debes asegurarte que el contenido que creaste llegue a la audiencia correcta, a través de los canales correctos. Debes hacer accesible el valor para que lo puedan ver y obtener donde ellos están.

¿Dónde puedes distribuir tu contenido?

  • Comunidades: como grupos de Facebook o foros especializados.
  • Redes sociales: con alcance orgánico o pagado.
  • Página web: a través de tu blog o entregando recursos como ebooks o whitepapers.
  • Lista de correo electrónico: este es uno de tus activos más valiosos, y debes tratarlo como tal.

¿Cuál es el mejor canal? Eso depende de las características únicas de tu audiencia, de tu negocio y de tu nicho. Debes estar constantemente calibrando tu proceso de distribución y adaptando tus estrategias de acuerdo a tus resultados.

En conclusión, la publicación de contenido no es el fin de un proceso de creación, es sólo el inicio.

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